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10 pueblos con encanto en el Baix Empordà

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La Bisbal d'Empordà

La Bisbal d'Empordà
La Bisbal d'Empordà | Foto: Julià Minguillón - CC BY

La capital del Baix Empordà es especialmente reconocida por la artesanía de la cerámica: una actividad muy importante para el pueblo, que da vida a sus calles y que está presente desde el siglo XVIII.

“Cerámica de la Bisbal” es la marca registrada que os permitirá reconocer los productos propios del municipio y podréis encontrarlos en los comercios especializados, en el Terracotta Museo e, incluso, en el taller de algún ceramista.

Pero el encanto de La Bisbal d’Empordà está también en sus alrededores.

Hay varias rutas para todos los niveles que te permitirán conocer la población de una manera diferente: puedes visitar Els Pous del Glaç d’en Salamó, el Daró y la Font de l’Arbre o incluso acercarte a Castell d’Empordà y conocer su núcleo medieval. Os recomendamos 100% las vistas desde el Castell-Palau de la Bisbal. ¡Son espectaculares!

Y, si lo vuestro es la bicicleta, también hay rutas de diferentes dificultades ideales para este deporte.

Si tenéis oportunidad, os aconsejamos visitar el municipio durante La Fira del Circ al Carrer de la Bisbal d’Empordà, una fiesta tradicional en la que participan una gran variedad de artistas del circo en diferentes espectáculos.

La Bisbal d’Empordà, capital del Baix Empordà, es un municipio muy conocido por su cerámica, presente desde el siglo XVIII. Es una actividad muy importante para el pueblo y da vida a sus calles, de ahí que la veamos en chimeneas industriales y en una gran cantidad de comercios especializados en este material. De hecho, hay hasta una marca registrada como “Cerámica de la Bisbal”, para poder diferenciar los productos del municipio de aquellos que no lo son. Si visitas La Bisbal d’Empordà, es muy común acercarte al taller de algún ceramista para conocer un poco más del orígen y hacer algún que otro producto. ¡Incluso hay un museo!, el Terracotta Museo.

Para conocer del todo la Bisbal, no debes de quedarte únicamente con el pueblo. Hay varias rutas para todos los niveles que te permitirán conocer la población de una manera diferente: puedes visitar Els Pous del Glaç d’en Salamó, el Daró y la font de l’Arbre o incluso acercarte a Castell d’Empordà y conocer su núcleo medieval. Os recomendamos 100% observar las vistas desde del Castell-Palau de la Bisbal, ¡son espectaculares!

Para los amantes de las bicicletas, ¡no os preocupéis!, también hay rutas para vosotros. Hay varias rutas de diferentes niveles y técnicas ideales para practicar este tipo de deporte.

Si tenéis oportunidad, os aconsejamos visitar el municipio en las fechas en las que se celebra la fiesta tradicional la Fira del Circ al Carrer de la Bisbal d’Empordà, una fiesta en la que participan una gran variedad de artistas del circo en diferentes espectáculos.

Monells

Monells
Monells | Foto: Flamenc - CC BY-SA

Monells es uno de los núcleos del municipio de Cruïlles, Monells i Sant Sadurní de l’Heura.

Monells tiene un encanto especial por estar construido alrededor de los restos de un castillo del que actualmente solo se conservan las murallas. Sus calles siguen conservando su esencia medieval y pasear por ellas es todo un viaje al pasado. Acercaos a la plaza porticada: es el lugar ideal para vuestras postales medievales.

La riera el Rissec divide el pueblo en dos y el paisaje desde sus puentes es magnífico. Monells, aunque pequeño, es extraordinariamente fotogénico y con mucho, mucho, encanto.

Y una curiosidad cinematográfica: Monells fue uno de los escenarios principales en “Ocho apellidos catalanes”, la secuela de la exitosa “Ocho apellidos vascos”.

Peratallada

Peratallada
Peratallada | Foto: Jaime Alcover - Pixabay

Peratallada es un pueblo con un gran patrimonio histórico y ha sido declarado Conjunto histórico-cultural y Bien cultural de interés nacional por su arquitectura medieval. Su aspecto parece inmune al paso del tiempo.

Para entrar en el municipio, deberás dejar el coche en uno de sus parkings fuera de la muralla. Cuando entres a través de uno de sus portales, te acogerán sus callecitas estrechas y laberínticas que acaban en una pequeña plaza llena de restaurantes y tiendecitas artesanales.

Como podrás imaginar, en un pueblo así no puede faltar una fiesta medieval. En la feria medieval de Peratallada, todo el pueblo se convierte en escenario de los espectáculos medievales y recrean un mercado medieval de productos artesanales.

Pals

Pals
Pals | Foto: Andre Oortgijs / CC BY-SA

Pals es una de las joyas del Baix Empordà y, posiblemente, de toda Catalunya.

Su arquitectura se conserva de forma excepcional. Como si el tiempo se hubiera congelado para sus calles y fachadas de piedra, arcos y torres.

Nosotros te aconsejamos que visites la muralla, con sus cuatro torres del siglo IV, y considerada el mirador la Costa Brava. La Torre de las Horas es lo que queda del castillo que se construyó durante la Guerra civil catalana del siglo XV y que, posteriormente, convirtieron en el campanario que le da nombre.

Para los amantes del enoturismo, debéis saber que en Pals se encuentra la Casa-Museo de Cultura Ca La Pruna, con una exhibición de vinos y cavas catalanes y una réplica de una farmacia del siglo XVIII.

Y no te pierdas la visita a los arrozales con el tren “Xiulet de Pals”. Una visita de hora y media alrededor de los campos que incluye visita al molino del Arròs de Pals. ¡Un emblema gastronómico!

Y recuerda, en palabras de Josep Pla: “Pals no es bueno para una, sino para cientos de visitas”.

Palau-Sator

Palau-Sator
Palau-Sator | Foto: Vincent van Zeijst - CC BY-SA

Palau-Sator es un municipio con varios núcleos urbanos (Palau-Sator, Fontclara, Sant Julià de Boada, Sant Feliu de Boada i Pantaleu) y una excelente ubicación dentro de la comarca.

Su gran atractivo turístico es la muralla del s. XII, muy bien conservada y que podemos cruzar a través de un portal al recinto antiguo.

En cada uno de los núcleos encontraréis una iglesia con historia peculiar. Si tenéis tiempo, acercaos a visitarlas y conoced un poco más sobre su historia.

Además, en el centro del pueblo se encuentra el castillo: una fortificación del s. X declarada Bien de interés nacional del que aún se conserva la Torre de las Horas, de veinte metros de altura.

Y, foodies, regocijaos. Aquí se encuentra el restaurante Mas Pou, uno de los mejores restaurantes de la comarca. Visita obligadísima.

La Pera

La Pera
La Pera | Foto: Jordi Domènech / CC BY-SA

La Pera es un municipio situado al oeste de la comarca del Baix Empordà y también está compuesto por varios núcleos: Púbol, Pedrinyà y Riuràs.

Entre las calles medievales de La Pera, podéis descubrir rincones tan bonitos como el Pont del Tinell.

En Púbol, el lugar donde falleció Salvador Dalí y donde está enterrada su esposa Gala, se encuentra la Casa-Museo Castillo Gala Dalí. Uno de los puntos clave del surrealismo catalán.

De visita obligada también es la Iglesia de Sant Pere (s. XIV). Pese a que durante la Guerra Civil destruyeron la mayoría de sus tesoros, lograron rescatar la obra de Bernat Martorell del s. XV que actualmente se expone en el Museo de Arte de Girona.

Ullastret

Ullastret
Ullastret | Foto: Josep Renalias - CC BY-SA

El hogar de la Ciudad Ibérica de Ullastret: la ciudad íbera más grande de Cataluña.

La visita a esta antigua ciudad se complementa con su Museo, en el que se exponen los descubrimientos arqueológicos del yacimiento: el Martillo de Corte, las máscaras de Terracota, el Vaso de los Caballos y varias piezas del s. VI a.C.

Otro lugar digno de visitar es la iglesia románica de Sant Pere d’Ullastret, del s. XI.

Ullastret fue un pueblo medieval totalmente amurallado y hasta el siglo XV la población no se expandió fuera de sus murallas. Si paseas por sus calles estrechas y empinadas podrás descubrir partes de la antigua muralla en muy buen estado de conservación. A día de hoy, se conservan diez torres de la muralla: una de ellas, la prisión, te será fácil de distinguir por su forma circular.

Si visitas Ullastret, aprovecha para tomar algo en sus terrazas: ¡tienen unas vistas insuperables!

Torroella de Montgrí

Torroella de Montgrí
Torroella de Montgrí | Foto: Kippelboy - CC BY-SA

Torroella de Montgrí es un pueblo rodeado de campos y huertos en el que la agricultura tiene un papel muy importante.

Como también lo es su Castillo del Montgrí, visible desde muchos puntos del Empordà. El recorrido hasta el Castillo se puede hacer a pie y está adecuado para hacer la ruta con los peques de la casa (aunque no con cochecitos).

También podemos encontrar el Museo de la Mediterrània, dedicado al conocimiento del Mar Mediterráneo a través del sonido y la música, con espacios de arte y exposiciones permanentes y temporales.

Torroella de Montgrí es el lugar ideal para pasear y desconectar de nuestra rutina. A lo largo de tu paseo, irás descubriendo la variedad de épocas que han configurado el municipio.

Visita obligada a la Plaza de la Vila, una plaza porticada llena de lugares de ocio en la que se encuentra el Ayuntamiento y la Capilla de Sant Antoni.

Y si os gustan las leyendas populares, acercaos a la Torre de las Brujas. Era lugar de encuentro habitual de las brujas y los caballos, aterrorizados, se negaban a cruzar su portal. El rey mandó tapiarlo, pero al día siguiente, apareció perforado. Y otra vez. Y otra. Cuando el rey decidió poner guardia, los guardianes desaparecieron por la noche. Desde entonces, no se recomienda visitar el lugar los sábados por la noche. Vosotros mismos...

Palamós

Palamós
Palamós | Foto: Bocachete - CC BY-SA

Palamós es sinónimo de aroma de mar, pesca, playas y brisa. Un lugar lleno de historia con orígenes en la época de la piratería.

Uno de los lugares más importantes es su puerto, que se convirtió en un lugar estratégico para la expansión y la lucha por el Mediterráneo. Visitad el Museo de la Pesca, la Lonja y el Mercado pero, sobre todo, el Espacio del Pescado: una aula gastronómica en la que podremos aprender a identificar el pescado, a prepararlo y a cocinarlo a través de cursos, talleres y degustaciones.

Otro lugar lleno de encanto es el Camino de Ronda. Es el lugar perfecto para conocer el sendero litoral. Pasaréis por Cala S’Alguer, considerada Bien Cultural de Interés Nacional por sus paisajes. ¡Imagina como son!

La Playa del Castell es puro paisaje Mediterráneo. Y, si seguís por el Camino de Ronda, también descubriréis el Poblado Ibérico de Castell, en el que hay restos arqueológicos de un yacimiento íbero, el Castillo de Vila-Romà y el Santuario de Bell-Lloc.

Para redondear la visita a Palamós, no dejéis de visitar alguno de los miradores que hay repartidos por toda la villa: La Plaza Murada, el mirador natural del puerto, la Punta del Muelle Nuevo, el Pedró, el Molino de Viento… una delicia para vuestros ojos (y vuestras cámaras).

Begur

Begur
Begur | Foto: Albert Torelló - CC BY-SA

Begur es uno de los pueblos con más encanto de la Costa Brava. Y es que sus monumentos, el núcleo románico de Esclanyà, sus calas y sus playas, Begur da forma a un conjunto paisajístico maravilloso.

Su historia recae principalmente en el famoso Castillo de Begur. Una gran pieza arquitectónica o medieval que destaca desde cualquier rincón del municipio y uno de los lugares que debe aparecer en una postal de Begur.

Begur es muy famoso por sus playas y calas de agua transparente que te invita a bañarte. Pasea el Camino de Ronda y descubrirás rincones espectaculares entre las diferentes playas. Tranquilidad y paisaje a partes iguales.

También podréis disfrutar de sus rutas de senderismo (el Camino del Agua, el Sendero Local Des Quinze…) de diferentes niveles y duraciones.

La gastronomía de Begur refleja la riqueza de la ciudad, centrada en los pescados y mariscos. El pescado de roca es el elemento gastronómico principal de Begur y celebran anualmente una campaña gastronómica en la que los restaurantes elaboran sus mejores platos. ¡Una oportunidad magnífica para descubrir la gastronomía de la Costa Brava!