Los 4 Museos en Cadaqués mejor valorados
Casa - Museu Salvador Dalí
La figura de Salvador Dalí siempre ha estado estrechamente relacionada con la Costa Brava. A día de hoy sigue siendo así, puesto que aquellas personas que quieren profundizar en la vida de este artista pueden hacerlo visitando la que fue su casa durante más de medio siglo, la cual estaba ubicada en Portlligat.
Historia de la casa
Tras quedarse enamorado de la zona, Salvador Dalí no dudó en adquirir un par de barracas. Tras depositar su confianza en Joaquim Ferrer, un albañil con mucha experiencia, poco a poco fue dando forma a una vivienda que destacaba sobre todo por sus espectaculares vistas al mar.
Años más tarde, tanto Dalí como su esposa Elena Ivánovna, popularmente conocida como Gala, decidieron contratar a Joan Vehí, un prestigioso carpintero que se encargó de transformar otra barraca que acababan de comprar en una especie de biblioteca.
Gala falleció en el año 1982, momento a partir del que Dalí decidió no volver a su propia casa. Siete años después, la eminencia artística nacida en Figueres pereció.
A día de hoy no es una vivienda, sino que se trata más bien de un espacio museístico al que dieron forma dos afamados arquitectos. Actualmente la Casa-Museu Salvador Dalí es disfrutada histórica y artísticamente por más de cien mil visitantes cada año.
Cómo es la casa-museo
Lo primero que llama la atención es el aspecto laberíntico que presentan las instalaciones. Una serie de pasillos que no son demasiado amplios dan paso a varios espacios que no tienen salida, así como a algunos desniveles que pueden llevar incluso a la desorientación.
Cada estancia presente en la Casa-Museu Salvador Dalí cuenta con aperturas que cambian en lo referente no solo a la forma, sino también al tamaño. Se trata de otra muestra más de lo mucho que enamoraba Portlligat al artista de Figueres, concretamente su bahía, la cual estaba plasmada en algunas de sus obras y también en su propia vivienda.
La casa también refleja lo mucho que le gustaban las tendencias kitsch a Salvador Dalí, además del estilo surrealista. Ambos diseños pueden apreciarse en los tres espacios muy diferenciados con los que cuenta la Casa-Museo. En el primero de ellos se puede apreciar incluso de manera íntima cómo vivía el matrimonio en esta casa.
Por otra parte, el taller es otro de los espacios que más impresionan a los visitantes, ya que en él es posible ver cómo trabajaba un artista que marcó un antes y un después. Finalmente, los espacios que hay en el exterior son otra zona que llama la atención.
Al acceder a la Casa-Museu Salvador Dalí se entra a una sala presidida por un elemento que Edward Frank Willis James regaló a Dalí y a su esposa. Se trata de un oso que era utilizado para varios fines, desde mantener a buen recaudo los paraguas hasta sostener un punto de luz. Cerca de ese oso hay un ave disecada, concretamente un búho, lo cual es un claro ejemplo de la pasión que tenía el matrimonio por la conservación y exposición de fauna, disciplina conocida como taxidermia.
Tras pasar por esta zona se llega al taller. Tanto los caballetes como otros elementos que Salvador Dalí utilizaba para dar rienda suelta a su creatividad e imaginación siguen estando presentes en este espacio, conservándose todos los utensilios a la perfección.
Después de visitar el taller llega el momento de acceder a una habitación en la que se encuentra representado Nerón Claudio César Augusto, en concreto con un busto hecho de yeso. Precisamente fue este mismo elemento artístico el que le llevó a dar forma a uno de sus cuadros más icónicos: Desmaterialización de la nariz de Nerón, el cual vio la luz en el año 1947.
Tras disfrutar visitando el taller se puede observar un tocador utilizado por la esposa de Dalí, además de una especie de vestidor en el que hay multitud de armarios. No es ropa lo que está presente en el interior de dichos muebles, sino fotografías de Gala y Salvador en las que se les ve junto a varias celebridades mundialmente conocidas.
Cruzando el mencionado espacio se llega a un habitáculo que recibe el nombre de Sala Oval. Era frecuentado sobre todo por la esposa de Salvador Dalí, aprovechándolo para disfrutar de una de sus principales aficiones: la lectura. En este lugar también recibía a varios visitantes y conocidos en general.
Si por dentro la Casa-Museu Salvador Dalí llama mucho la atención, no se queda atrás la parte exterior. Y es que estamos ante una zona que también está muy bien cuidada, demostrándolo a la perfección el patio. Nuevamente el acceso a este espacio exige pasar por una zona laberíntica en la que hay un comedor que utilizaba el matrimonio para tomar algo y comer en plena estación veraniega.
En algunos espacios del exterior hay elementos ornamentales con un gran valor histórico y artístico. El mejor ejemplo posible es el de la figura Ilisos, creada por el escultor Fidias. La reproducción con la que contaba Salvador Dalí y que sigue presente en el patio de su casa permanece en un estado excelente, pudiendo decirse lo mismo de las jardineras de grandes dimensiones cuya forma recrea la apariencia de una taza.
Finalmente, en la Casa-Museu Salvador Dalí también puede observarse la piscina que se construyó en el año 1967. Es sin duda alguna el punto de la casa que despierta una mayor admiración. Y no es para menos, puesto que hay multitud de elementos pensados para la decoración que son realmente bonitos y originales. Por ejemplo, en la piscina de la casa hay un par de cisnes de los que sale agua, así como un sofá con forma de labios.
Tarifas
Visitar este espacio museístico de Portlligat tiene un precio de 18€ por cada entrada individual, mientras que si es reducida el coste es de 11€, siendo imprescindible reservar para poder acceder a la Casa-Museu Salvador Dalí.
Expo Dalí
Expo Dalí, ubicado en la encantadora Costa Brava en Carrer de Santa Margarida 24, CP 17488, es un destino cultural imperdible para los amantes del arte. Esta exposición cuenta con una amplia colección de obras de Salvador Dalí, incluyendo pinturas, esculturas y litografías, que representan una perspectiva única del genio surrealista.
Los visitantes destacan la calidad y variedad de las obras, así como un ambiente acogedor sin necesidad de reservas previas. Algunas de las características más valoradas son:
- Un precio de entrada asequible (10 euros).
- Exposiciones distribuidas en tres plantas, permitiendo explorar en profundidad su trayectoria artística.
- La posibilidad de acceder con mascotas, lo que añade un toque especial a la visita.
- Un personal amable y atento que ofrece explicaciones en varios idiomas.
- Una colección única que incluye obras menos conocidas, junto a ilustraciones para obras literarias.
Con comentarios como 'fantástica colección' y 'muy recomendable', Expo Dalí es sin duda una experiencia cultural que vale la pena vivir.
Museu de Cadaqués
El Museu de Cadaqués, situado en la hermosa Costa Brava en Carrer d'en Narcís Monturiol 15, CP 17488, ofrece una experiencia única que combina historia, arte y cultura. Esta institución, en colaboración con la Fundació Joan Vehí, destaca por:
- Exposiciones Fotográficas: Presenta una rica colección de fotografías sobre Salvador Dalí y la historia cultural del pueblo.
- Atención al Cliente: Los visitantes elogian la amabilidad y profesionalidad del personal, quienes brindan una atención personalizada y están dispuestos a compartir su pasión por el arte.
- Ambiente Acogedor: El museo ofrece un espacio agradable y bien organizado, lo que permite a los visitantes disfrutar de la exposición en un entorno cálido y amigable.
- Accesibilidad: Ubicado a solo unos minutos a pie de la playa, permite a los visitantes explorar el encantador pueblo de Cadaqués antes o después de la visita.
¡Visitar el Museu de Cadaqués es una experiencia que no te puedes perder!






