Los Museos en Palamós mejor valorados
Museu de la Pesca
Históricamente los seres humanos siempre han estado estrechamente relacionados con el mar en general, siendo el objetivo del Museu de la Pesca dar a conocer este vínculo existente, así como concienciar a los visitantes sobre un aspecto fundamental: la importancia que adquiere la pesca para la sostenibilidad de todo el territorio.
Este espacio museístico está ubicado en Palamós, concretamente en el puerto de una de las ciudades con más encanto de la Costa Brava. La ubicación elegida es inmejorable para conseguir que visitantes de todas las edades descubran qué patrimonio tanto natural como cultural e incluso social está asociado directamente a la pesca.
Recorrido
Desde el 2002, año en el que se inauguró el Museu de la Pesca, siempre se ha planteado el mismo recorrido que empieza desvelando la incógnita de qué es exactamente aquello que se pesca. Es en este espacio donde el mar Mediterráneo adquiere una especial relevancia, así como las diversas especies marinas que forman parte de él.
Seguidamente el recorrido pasa por un punto destinado a averiguar dónde se realiza la actividad de la pesca. Algunos caladores repletos de actividad pueden ser admirados en una exposición permanente que está muy bien acondicionada e iluminada para que la experiencia sea gratificante en todos los sentidos.
La próxima parada del recorrido museístico está estrechamente relacionada con los pescadores, quienes se convierten en los protagonistas, junto a varios compañeros de otras profesiones que también adquieren una especial trascendencia: desde los vendedores que comercializan el pescado que obtienen dichos pescadores hasta los mecánicos que arreglan sus embarcaciones para que puedan llevar a cabo con normalidad su actividad en el mar Mediterráneo.
En esta parte del recorrido los visitantes averiguan cómo eran los pescadores de antaño y cómo son los de ahora, compartiendo todos ellos el mismo espíritu superviviente, así como la valentía que siempre les ha caracterizado, especialmente al tener que hacer frente a jornadas laborales con una mar demasiado revuelta -bastante habitual en la Costa Brava-.
La penúltima fase del recorrido que comprende el Museu de la Pesca está dedicada a mostrar a los visitantes cómo se pescaba en tiempos anteriores, además de los métodos que se ponen en práctica hoy en día. Embarcaciones y utensilios pueden ser observados, destacando la gran mayoría de ellos por estar en un envidiable estado de conservación. Es meritorio especialmente en el caso de las barcas de pescadores, ya que el contacto directo con el mar y la corrosión parecen no haberles pasado demasiada factura.
Finalmente, el recorrido termina tratando de concienciar a cada visitante sobre lo importante que es dignificar la pesca, especialmente si se quiere que dicha profesión también tenga relevancia en el futuro.
Colección
A lo largo del recorrido anteriormente descrito se observan algunas piezas de la colección del Museu de la Pesca que merecen una mención especial, empezando por aquellas dos que atraen más miradas por parte de los visitantes. Nos referimos a un par de embarcaciones, conocidas como Estrella Polar y Gacela. Son muy distintas entre sí, dando ello a entender lo variado que era el sector en su momento y sigue siendo a día de hoy.
Continuando con lo referente a las embarcaciones, en este museo también hay un chigre que se utilizaba con tal de vararlas, así como sacarlas del medio acuático cuando había terminado la jornada de pesca.
Otro elemento que suele llamar bastante la atención de las visitas es el plato hecho de cerámica unos cuatrocientos años antes del nacimiento de Cristo. Concretamente es una parte que se conserva bien, incluyendo los crustáceos y los diversos peces que forman parte del conjunto a modo de decoración.
Por supuesto, en el Museu de la Pesca no faltan multitud de herramientas y utensilios en general que utilizaban antaño los pescadores, siendo actualmente algunos de ellos muy prácticos para la pesca del siglo XXI. Claros ejemplos son la brújula para orientarse y los flotadores de vidrio que se necesitan para la pesca de arrastre.
Tarifas
La entrada general individual tiene un coste de 5 euros. Los parados y los jóvenes de hasta dieciséis años han de pagar 2,50 euros por la entrada, mientras que los niños de edades comprendidas entre los cero y los seis años pueden acceder gratuitamente al Museu de la Pesca.



